Conocer la cultura de cada región del país es una experiencia gratificante, pero pocas experiencias resultan tan reconfortantes como disfrutar en la Rioja del Enoturismo. Una zona del país donde el vino es parte indispensable de su cultura e historia. Esto se ve reflejado en el estilo de vida actual de sus pobladores y en las actividades que los mismos desarrollan.
Para los turistas interesados en dichas costumbres en esta provincia es posible conocer aproximadamente 80 bodegas de vinos operativas y reconocidas. También es posible visitar los viñedos, practicar deportes en sus zonas aledañas e incluso participar del trabajo de un viticultor o realizar el pisado de las uvas.
Además para quienes deseen una experiencia más informativa se ofrecen múltiples talleres de cata en la región junto a la posibilidad de conocer el museo del vino. Por lo que la Rioja es un excelente destino para aquellos amantes del vino y su cultura.
Rutas de Enoturismo en La Rioja.
En la Rioja el enoturismo cuenta con múltiples formas de experimentarse, cada una dispuesta conforme a diferentes perspectivas de lo que es la viticultura. Por ello es importante conocer las diferencias de cada una de sus rutas para poder escoger la indicada.
Entre sus principales alternativas se encuentran: Las Riberas del Ebro de Navarro, Logroño, Haro, Marqués de Riscal y el Museo Vivanco de la Cultura del Vino. Para servir como guía sobre las distintas opciones, a continuación se explicarán las actividades que se pueden realizar en cada una de ellas.
Las Riberas del Ebro de Navarro
Ubicadas en Andosilla, localidad ubicada en el Camino de Santiago a la izquierda del Ebro. Aquí se encuentran las Bodegas Bagordi, una de las primeras en realizar los cultivos ecológicos. Dicha empresa ofrece para sus visitantes la experiencia de conocer sus bodegas, sus viñedos o cualquier lugar relacionado con su producción. También permiten la visita a las fábricas y ofrecen talleres de cata.
Además en toda esta experiencia es posible disfrutar de la hermosa vista del Valle del Ebro que es visible desde sus instalaciones. Gracias a la calidad de la tierra en esta zona, Navarra es conocida no solo por el vino sino por todos los productos consecuentes de su agricultura.

Logroño
Logroño es la capital de La Rioja, donde el enoturismo se ve presente en la mayor parte de su territorio. Al llegar al centro es posible visitar las Bodegas Franco españolas, una de las más antiguas del país, con más de 120 años dedicados a la elaboración de vinos. En las cuales es posible asistir a visitar guiadas y observar cómo ha evolucionado el proceso para la producción del vino.
También en esta localidad es posible disfrutar de la experiencia de dormir en un hotel-bodega. Como es el caso del hotel Casa del Cofrade y el hotel Finca los Arandinos. Estos se encuentran situados junto a bodegas que permiten las visitas del público y desde sus habitaciones es posible disfrutar de la vista de los viñedos. Siendo una excelente manera de complementar la experiencia dedicada al enoturismo.
En caso de visitar la Rioja por el enoturismo es necesario visitar la calle Laurel en Logroño, una calle entera dedicada casi íntegramente al vino. Y donde podrás comer deliciosos pinchos y raciones.
Haro
Haro cuenta también con una profunda relación con la viticultura, apreciable desde sus monumentos hasta sus hoteles. Es posible encontrar múltiples bodegas dedicadas a instruir sobre historia y catas de vinos a sus visitantes. Como es el caso de las bodegas Muga donde además del vino se ofrece una experiencia gastronómica con el fin de descubrir el potencial del maridaje. También cuenta con una de las pocas tonelerías aún operativas de toda España.
Para complementar la visita en la Rioja por el enoturismo se ofrece la opción de dormir en un antiguo convento. El hotel Eurostars los Agustinos permite a sus visitantes la experiencia de disfrutar de su arquitectura única en el centro de su localidad.
Marqués de Riscal
La visita a las bodegas Marqués de Riscal son una de las opciones más recomendadas para turistas que busquen una experiencia enriquecedora. Entre los servicios que se ofrecen se plantea la posibilidad de recorrer las instalaciones de la bodega, observar cómo han evolucionado sus métodos y la cata de sus productos.
Para hacer de esta una opción mucho más completa, cercano a sus instalaciones se encuentra un restaurante con una excelente propuesta gastronómica. Además de poder visitar un museo-bodega de mediados del siglo XV dedicado a la historia del vino.
Museo Vivanco de la Cultura del Vino.
Esta propuesta no es solo una de las mejores en la Rioja para el enoturismo, incluso se considera el mejor museo de vinos en el mundo. Por lo que la reputación que precede a este lugar es incomparable, convirtiéndose en una visita obligatoria para amantes del vino.
El museo al igual que cualquier otro cuenta con una amplia gama de reliquias e información referente a la historia del vino. Las cuales se dividen en sus 6 salas, donde es posible encontrar joyas como la colección de sacacorchos más grande del mundo, esculturas, pinturas de múltiples artistas de renombre e incluso artículos antiguos propios de los métodos tradiciones para la elaboración de vino.
También se puede visitar una enorme bodega subterránea que se encuentra incluida en la visita a las instalaciones. Uno de los elementos más impresionantes de este museo es el “Jardín de Baco” donde se encuentran más de 200 especies de uvas distintas. Estas, en función de la época se utilizan en distintas actividades, cada año se realizan eventos o dinámicas diferentes con los turistas para que resulte en una experiencia divertida pero de aprendizaje.
Enoturismo con niños
Pese a que se pudiera considerar que visitar la Rioja por el enoturismo es una actividad para adultos, no significa que esta sea impedimento para el disfrute de los niños. Hay múltiples bodegas que han adaptado su experiencia para permitir el disfrute de ellos y para que aprendan.
En Fuenmayor una bodega dedicada al turismo se encuentra realizando una serie de actividades donde el grupo de turistas con ayuda de profesionales será guiado en la elaboración del vino. Para ello se les explicará paso por paso el proceso, junto con interacción de los mismos se realizará el mosto y finalmente el vino. Con dichas actividades se quiere inculcar en los niños el cuidado de la naturaleza, el respeto por la misma al igual que conceptos básicos de la viticultura.
En otras bodegas de La Rioja también se pueden realizar actividades un tanto menos informativas para los niños. Dedicadas principalmente a su esparcimiento pero en la cual podrán visitar las bodegas y los viñedos mientras se encuentran en distintos tipos de puzles o dinámicas. De modo que puedan explorar dicho ambiente de una forma más interactiva para ellos, ideal para niños que pudiesen no verse tan interesados en actividades informativas.